Cuatro pasos para preparar una entrevista de trabajo
La primera fase de los procesos de selección es la criba curricular. Si tu currículum le resulta interesante a la empresa, es probable que te citen para una entrevista de trabajo.
¿Cuál es el objetivo principal de la entrevista? Averiguar si el candidato es idóneo para el puesto que se oferta.
Por ello, el entrevistador intentará contrastar y verificar la información que aporta tu currículum, así como conseguir otra información relevante. No sólo valorará tus conocimientos y experiencia, sino también otros aspectos como actitudes, competencias o motivación.
¿Es necesario preparar las entrevistas de trabajo?
Sí, siempre. Aunque te ajustes perfectamente al perfil requerido por la empresa, es imprescindible que prepares a conciencia cada entrevista que realices.
De ella dependerá que avances en el proceso de selección o que seas descartado.
En algunos casos, el desempeño del candidato en la entrevista de trabajo determinará el salario que se le ofrece (recuerda las conocidas expresiones “salario a convenir” o “salario según valía”).
Los cuatro pasos para preparar una entrevista
Paso 1: Autoconocimiento
Repasa tu currículum y verifica que eres capaz de explicar cada punto del mismo. Es importante no titubear cuando tengas que responder a preguntas sobre ti mismo, tus habilidades o tu experiencia.
A continuación te propongo una serie de cuestiones que deberías plantearte antes de acudir a la entrevista:
- ¿Cuáles son mis puntos fuertes o virtudes?
- ¿Cuáles son mis defectos o áreas de mejora?
- ¿Cuántos años de experiencia tengo? Por ejemplo, ante la pregunta “¿cuántos años trabajaste en la última empresa?”, la respuesta no debería ser “muchos años”, sino dar un dato preciso (por ejemplo, “trabajé allí durante ocho años”).
- ¿Qué funciones desarrollaba en mis anteriores trabajos? ¿Cuáles eran mis responsabilidades?
- ¿Cuáles han sido mis mayores logros profesionales?
- ¿Qué es lo que más motiva del trabajo?
Reflexiona sobre tus conocimientos, habilidades y experiencia. No sé trata de memorizar tu currículum al pie de la letra y dar respuestas estereotipadas, sino de demostrar seguridad y confianza al responder.
Paso 2. Conseguir información de la empresa y del puesto
Para dar una buena impresión al entrevistador, debes mostrar un interés real por el puesto de trabajo que ofrecen.
Una de las formas de demostrar tu interés es buscar toda la información posible de la empresa y del trabajo a realizar.
Revisa la oferta de empleo a la que te inscribiste: ¿Qué requisitos solicitan?, ¿qué ofrecen?, ¿dónde está ubicado el centro de trabajo?, etc.
Si esta información estaba publicada en la oferta y tú la desconoces en el momento de la entrevista, el seleccionador interpretará que le das poca importancia al trabajo.
Sin embargo, saber qué perfil está buscando la empresa te ayudará a adecuar tus respuestas.
En cuanto a la empresa, busca por Internet información sobre cuestiones como: ¿A qué se dedica?, ¿cuáles son sus servicios o productos?, ¿cuál es su sector?, ¿es una pyme o una gran empresa?, ¿en qué ámbito geográfico trabaja?, etc.
Puedes encontrar esta información en la web de la empresa, en Internet o a través de sus empleados (puedes visitar los perfiles de redes sociales como LinkedIn de algunos empleados).
Esta información te será de ayuda para conocer cómo es la empresa, cuál es su cultura organizativa, sus valores, etc.
Paso 3. Prepara tus preguntas
Durante la entrevista de trabajo, puedes formularle al entrevistador algunas preguntas para recabar más información sobre el puesto de trabajo ofertado y mostrar interés por el mismo.
Puedes realizar preguntas como: ¿Trabajaría en equipo?, ¿cuántas personas componen el departamento?, ¿tendría personas a mi cargo?, ¿existen posibilidades de promoción o formación dentro de la empresa?, etc.
Existen una serie de “temas tabú” acerca de los cuales es preferible no preguntar en la primera entrevista a no ser que en entrevistador mencione el tema. Estos temas que suelen tratarse más adelante son retribución, vacaciones, horarios, turnos, etc.
Paso 4. Prepara la respuesta a las preguntas más comunes
Con bastante frecuencia, en las entrevistas de trabajo se repiten una serie de preguntas. Por ello, es recomendable que las conozcas y prepares una respuesta a las mismas. Algunas de estas preguntas habituales son:
- ¿Por qué cesaste en tu anterior empleo?
- ¿Por qué quieres cambiar de empleo o empresa?
- ¿Qué funciones has desempeñado?
- ¿Cómo era la relación con tus compañeros, jefes o subordinados?
- ¿Cuál ha sido su mayor logro profesional?
- ¿Por qué quieres trabajar en esta empresa?
- ¿Qué puedes aportar a esta empresa?
- ¿Por qué crees que deberíamos seleccionarte a ti y no a otro candidato?
- ¿Cuáles son tus principales virtudes? ¿Y defectos?
- ¿Cómo se imagina a usted mismo dentro de cinco años?
- Descríbase a usted mismo.
- Describa su empresa ideal.
- ¿Cuáles son tus expectativas salariales?
La entrevista de trabajo es el momento en el que debes mostrar lo mejor de ti y no puedes dejar al azar tu actuación en la misma.
Conócete a ti mismo, analiza tus puntos fuertes para destacarlos en la entrevista y muestra interés por la empresa y por el puesto que ofrecen.
Preparar a conciencia la entrevista de trabajo puede marcar la diferencia e inclinar la balanza hacia tu candidatura.
El éxito no es cuestión de azar, sino una recompensa al esfuerzo y la preparación.