¿Eres espectador de tus relaciones sexuales?

    ¿Eres espectador de tus relaciones sexuales? © Depositphotos.com/Marin Conic

    “¿Podré hacerlo?”. Es posible que alguna vez te hayas hecho esta pregunta, o algunas otras, en relación a tu capacidad para mantener una relación sexual satisfactoria.

    Estás con tu pareja en una situación íntima y por tu cabeza sólo pasan pensamientos de este tipo, dudas sobre si serás capaz de realizar tu función con éxito. Es entonces cuando aparecen los problemas.

    En este artículo te explicaré lo básico sobre este aspecto psicológico de la respuesta sexual, abordando las causas y el modo de gestionarlo.

    ¿Eres espectador de tus relaciones sexuales?

    Disfunción erectil y eyaculación precoz

    Dos de los principales problemas sexuales masculinos son la disfunción eréctil y la eyaculación precoz.

    Obviamente existen varias causas que explican estas dificultades, como pueden ser problemas físicos, causas médicas, y también problemas en la relación de pareja.

    Sin embargo, la semilla de muchos de estos problemas se encuentra en nuestra psicología, debido a la ansiedad que experimenta la persona cuando se encuentra a punto de realizar el acto sexual.

    El rol del espectador se refiere al fenómeno en el que la persona deja de prestar atención a la relación sexual en sí, a las sensaciones físicas que se producen y a los estímulos propios del contacto sexual, para centrarse en su propio rendimiento, en sus reacciones físicas y en que todo “salga bien”.

    Por ello, el sujeto “sale” de la relación sexual para verla desde fuera, como un espectador de la misma, y no como una de las partes que está realizándola.

    Por tanto, estamos hablando de una preocupación excesiva por la capacidad de la persona para consumar el acto, temiendo posibles consecuencias que considera catastróficas.

    Es común que estas personas lleguen a preguntarse cosas como: “¿Podré tener una erección?”, “¿Seré capaz de mantenerla?”, “¿Le estará gustando?”, o a decirse frases como “Tengo que durar más”, etc.

    Es como un pez que se muerde la cola, pues cuanto más estés pensando en tu propia capacidad para hacerlo y más estés deseando que todo salga “perfecto”, a más presión te estás sometiendo y mayores son tus expectativas, por lo que más miedo al fracaso tienes.

    Esto, paradójicamente, hace que tengas más probabilidades de sufrir uno de los problemas mencionados anteriormente. 

    No sólo eso, sino que, como consecuencia de esta preocupación, es posible que no disfrutes plenamente de la relación y acabes sintiendo que no ha sido tan buena como esperabas.

    De espectador a actor

    ¿Qué puedes hacer? Lo primero que debes tener claro es que las relaciones sexuales no deberían implicar una autoexigencia por parte de los sujetos, sino que habrían de basarse en el disfrute pleno del momento.

    No debemos exigir nada al otro ni a nosotros mismos ni obligarnos a estar en un determinado nivel, sino que debemos saber qué le gusta a nuestra pareja y que sepa qué nos gusta a nosotros.

    Por ello, la comunicación es, una vez más, clave en la relación de pareja, tal y como ya te hemos contado en el artículo "Para los problemas de pareja: comunicación".

    Otro aspecto importante relacionado con el rol del espectador es precisamente de lo que trata este problema: centrarse en la actuación, en la duración, en la competencia física, en la satisfacción de la otra persona, etc., y dejar de prestar atención a los estímulos físicos que están ocurriendo en ese momento.

    Así, el principal cambio debe producirse en lo que llamamos la focalización sensorial, es decir, centrar nuestra atención en el contacto con la otra persona, los gestos, las caricias… todo lo que implique una estimulación física.

    Por tanto, si te reconoces en este rol de espectador, es importante que intentes dejar de ver la relación como si no estuvieses formando parte de ella, y comiences a darte cuenta de lo que está ocurriendo, sin exigencias ni altas expectativas, sino dejándote llevar y divirtiéndote con lo que estás haciendo.

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