Combate el estrés laboral
El estrés es el conjunto de reacciones psicológicas y fisiológicas provocadas por situaciones que consideramos amenazantes o desbordantes para nuestros recursos.
Es importante destacar que no existen situaciones estresantes, sino que las situaciones generarán estrés en función de la percepción que tengamos de ellas.
Por ejemplo, el exceso de trabajo puede ser visto por una persona como un reto, y por otra como una situación agobiante.
En el entorno laboral, el estrés se produce cuando las capacidades del trabajador se ven sobrepasadas por las exigencias del trabajo o cuando existe un desajuste entre los requisitos del puesto y los recursos o habilidades de los que dispone el empleado.
Si las demandas laborales son muy altas y no puedes controlarlas, aumenta el riesgo de padecer estrés.
Manifestaciones del estrés
Los síntomas del estrés pueden ser de diferente intensidad. Es importante no pasar por alto las primeras manifestaciones, aunque éstas sean de carácter leve. Los principales síntomas del estrés son:
- A nivel psicológico: irritabilidad, ansiedad, preocupación excesiva, insomnio, falta de concentración y atención, cansancio, mal humor, dificultad para tomar decisiones, inseguridad, confusión y otras alteraciones psicológicas.
- A nivel físico: hiperventilación, sudoración excesiva, mareos, náuseas, tensión muscular, taquicardia, dolor de cabeza, hiposalivación (sequedad en la boca) y otros tipos de trastornos. El estrés se considera un factor de riesgo en diferentes enfermedades, como los trastornos cardiovasculares.
Efectos del estrés laboral en las organizaciones
Las consecuencias del estrés laboral no sólo afectan a la persona que lo sufre, sino también a las empresas con las que trabajan. Los principales efectos del estrés laboral en las organizaciones son:
- Baja productividad y rendimiento.
- Aumento de bajas laborales y absentismo.
- Incremento de accidentes laborales.
- Deterioro de las relaciones en el trabajo (con compañeros, clientes, proveedores, etc.).
Manejo del estrés laboral
Para manejar el estrés y minimizar sus efectos perjudiciales para la salud, puedes poner en práctica los siguientes consejos generales:
- Técnicas de relajación: practica ejercicios de relajación muscular y de control de la respiración. Puedes realizarlos en casa o asistir a clases de relajación, yoga, meditación…
- Lleva una vida saludable: haz deporte, lleva una dieta equilibrada, duerme entre siete y ocho horas y evita hábitos poco saludables (consumo de alcohol, tabaco u otras sustancias).
- Busca apoyo social: un agravante del estrés es la falta de apoyo. Es útil que te comuniques abiertamente con las personas de tu entorno y busques su apoyo y colaboración.
Para combatir el estrés laboral, además de las recomendaciones citadas anteriormente, te propongo las siguientes rutinas:
- Organiza: planificar tu día laboral y elaborar una lista de las tareas a realizar reducirá la sensación de falta de control. La agenda puede ser tu gran aliada contra el estrés.
- Prioriza: detecta en tu lista de actividades cuáles de ellas son las más importantes y procura realizarlas en primer lugar. Te relajará comprobar que antes del almuerzo ya has cumplido con tus obligaciones prioritarias.
- Evita distracciones: emplear parte de tu jornada en distracciones improductivas puede hacerte perder un tiempo valioso que luego echarás en falta. No es necesario revisar el correo continuamente o estar pendiente de las redes sociales cada diez minutos. Facebook puede esperar.
- Delega: si no dispones de tiempo suficiente para realizar tus tareas y tienes la posibilidad de delegar, ¿por qué no hacerlo?
- Prevé el imprevisto: es posible que nos surjan tareas inesperadas que hacer, así que reserva un tiempo cada día para atender los imprevistos.
- Descansa en el trabajo: tómate el tiempo necesario para comer, haz pequeños estiramientos como mover la cabeza de un lado a otro, descansa diez minutos…
- Desconecta: cuando llegues a casa invierte tiempo en tus aficiones y disfruta de tu familia o amigos. Mañana será otro día.
En resumen, recuerda que el estrés afecta tanto a tu salud psicológica como física. Por ello, si crees que puedes padecer estrés laboral, es fundamental que pongas en práctica las recomendaciones indicadas para combatir sus efectos.
En los casos más severos, es necesaria la consulta a un profesional especializado.