Planes para tus hijos este verano: diversión y educación
Los niños ya disfrutan de sus vacaciones de verano, y el tiempo libre del que disponen tus hijos a partir de ahora aumenta considerablemente. Si tú también estás de vacaciones, podrás realizar múltiples planes con ellos.
Sin embargo, si no tienes tanto tiempo, es necesario que planifiquéis algunas actividades para que disfruten de estos días, no se aburran en casa, y así, también vosotros podáis estar tranquilos.
¿Qué hacer este verano en familia?
Hay muchas cosas que podéis hacer todos juntos estas semanas y meses.
Existen muchos parques de atracciones o parques acuáticos que, aunque es posible que estén más llenos de gente durante esta época, son el ambiente perfecto para los niños. Incluso en algunos de ellos podrán realizar actividades muy divertidas y que recordarán toda la vida, como nadar con delfines o con focas.
Del mismo modo, podéis hacer otras actividades al aire libre, como ir en piragua, hacer alguna ruta por la montaña, un paseo en barco o incluso un viaje en globo.
No hay que olvidarse de otras actividades muy divertidas para el niño que, a su vez, pueden ser muy educativas y culturales, como viajar, ir al cine a ver una película adecuada para ellos, hacer una visita a algún museo interesante para su edad o pasar un día en el zoo de la ciudad.
Existen muchas opciones, y en estas fechas muchos lugares de este tipo adaptan sus ofertas hacia un público menor.
Y, por supuesto, los niños en esta época también quieren descansar y pasárselo bien, así que id a la playa o a la piscina, llevadlo al parque o a merendar y dejad que pase tiempo con sus amigos.
Y como vosotros también necesitaréis vuestro tiempo solos, podéis dejar que los abuelos disfruten de sus nietos durante varios días, algo que será beneficioso tanto para unos como para otros, pues se afianzará el vínculo entre ellos.
En verano también se educa
Muchos niños vuelven a sus malos comportamientos durante el verano, y esto es porque muchas familias abandonan las pautas de educación que se realizan a lo largo del año.
No hay que dejarse llevar por las vacaciones: tu hijo también necesita ser educado durante estos meses, y es muy importante no abandonar las buenas costumbres.
Lo primero es no perder las rutinas positivas que tenga aprendidas el niño. Por ejemplo, la hora de dormir no tiene que cambiar drásticamente en verano, aunque tu hijo esté de vacaciones, porque alterará por completo su vida.
Igualmente dirigido hacia el horario, las conductas de higiene también deben mantenerse, ya sea la hora de ducharse, que quizá incluso deba aumentar en esta época calurosa, como lavarse los dientes o cualquier otra rutina de higiene.
Y, por supuesto, la alimentación también debe cuidarse. Aunque, por supuesto, pueden darse de vez en cuando algún capricho, hay que seguir manteniendo una alimentación saludable y equilibrada.
Otro importante aspecto que no hay que olvidar es el mantenimiento de sus responsabilidades. Es posible que tenga que realizar deberes durante el verano, por lo que no dejéis que se posponga su realización hasta la última semana antes del inicio del curso.
Que siga leyendo y haciendo tareas educativas, para que así no le cueste tanto volver a empezar.
Otra importante responsabilidad es mantener la organización, como el cuidado de su habitación o de sus pertenencias, así como con el resto de la casa.
Los campamentos de verano, una gran opción
En este sentido educativo, una perfecta opción para los niños en verano son los campamentos de verano.
Algunos son bastante caros, por lo que no todas las familias pueden permitírselos, pero existen otros más asequibles e igual de adecuados para tus hijos, o incluso algunos ofrecen becas y ayudas económicas.
Harán actividades al aire libre y con animales, como en las granjas escuelas, o incluso algunos están dirigidos a actividades deportivas o a cursos de idiomas.
Pero sobre todo jugarán y se divertirán con otros niños, haciendo actividades todo el día.
Lo mejor es que aprenderán a ser más responsables con tareas como limpiar o cuidar sus cosas, pero además aprenderán aspectos muy positivos, como la convivencia, el respeto o el compañerismo.
En verano, mejorad vuestra relación
Por último, el verano es una magnífica oportunidad para potenciar la comunicación entre vosotros. Es momento para que la relación padre-hijo se afiance y crezca.
Pasaréis más tiempo juntos y compartiréis más cosas, así que aprovecha para acercarte más a él y desarrollar ampliamente vuestra confianza.
Recordad los puntos clave: disfrutar en familia, dejar que descansen y se diviertan ellos mismos, pero, sobre todo, no descuidar su educación ni sus hábitos.